A principios del siglo XX, la vida de los reclusos en cárceles y prisiones se caracterizó en general por unas condiciones deplorables. Las cárceles a menudo estaban superpobladas y carecían de condiciones sanitarias adecuadas, con celdas pequeñas, sin apenas ventilación y poco higiénicas, que debían alojar a múltiples prisioneros en un espacio reducido.
En la mayoría de las prisiones de todo el mundo, los reclusos eran obligados habitualmente a trabajar en todo tipo de tareas manuales, como la fabricación de bienes, la agricultura o la construcción. Trabajos forzados que se utilizaban como una forma de castigo, pero también como un medio para generar ingresos para la prisión.
Para mantener el orden y controlar a los presos, los castigos físicos, como azotes o el confinamiento en solitario, formaban parte de la severa disciplina de la época, y no era extraño que los presos también llegaran a ser encadenados desnudos en ocasiones.
Las condiciones en las cárceles y prisiones a principios del siglo XX podían variar también en algunos casos según el estatus socioeconómico y racial de los reclusos. En muchos lugares, las personas de bajos ingresos y minorías étnicas estaban sobrerrepresentadas en el sistema penitenciario, y debían afrontar además otros problemas como la discriminación racial o el trato desigual dentro de las cárceles.
Aunque se comenzaba a reconocer la importancia de la rehabilitación ya en aquellos años, los programas en este sentido eran muy escasos. Las cárceles tendían a enfocarse más hacia el castigo por la pena cometida que a la rehabilitación, lo que dificultaba la reintegración de los reclusos a la sociedad después de cumplir sus condenas.
A estas terribles condiciones se sumaba que los reclusos con enfermedades mentales estaban recluidos entre la población penitenciaria general, sin que existieran tratamientos específicos para ellos. Si bien la creación de asilos mentales se produjo en el siglo XIX, estaban lejos de ser una solución rápida y las condiciones de los reclusos en general no mejoraron durante décadas.
Esto empezó a cambiar a partir de la década de 1950, cuando una serie de disturbios y protestas públicas dieron lugar a las "Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos", las cuales se adoptaron finalmente en 1955, y sirvieron para mejorar las condiciones en las cárceles y prisiones en muchos países.
Si bien se han producido avances significativos en la reforma penitenciaria desde entonces, muchos de estos problemas aún persisten en algunas partes del mundo, y la vida en las cárceles puede variar considerablemente hoy en día según el país y la región de que se trate.
Para entender un poco mejor cómo era la vida en prisión hace más de 100 años, aquí puedes ver una colección de fotografías de antiguas cárceles y prisiones a principios del siglo XX.
La prisión de Sing Sing (Nueva York) en 1915
El interior de una celda en la Prisión Sing Sing de Nueva York a principios del siglo XX
Reclusos haciendo punto en la Prisión de Sing Sing (1915)
Un grupo de presos obligados a realizar trabajos forzados en la prisión victoriana de Pentonville (al norte de Londres) en torno al año 1900. Los presos debían caminar sobre la rueda para hacerla girar durante 8 horas al día y no se les permitía hablar durante la tarea
Prisionero realizando trabajos forzados en su celda en la Prisión de Pentonville a principios de 1900. El preso debía girar la manivela un número determinado de veces si quería recibir su ración de comida
La antigua Cárcel Modelo de Madrid (1905)
El interior de la Cárcel Modelo de Madrid en 1905
Comedor de la Prisión Estatal de Wisconsin (1909)
Árbol de navidad en una cárcel de Washington D.C (1909)
Presos haciendo ejercicio en el patio de la Prisión Wormwood Scrubs (Reino Unido) en 1907
Pesando a los nuevos reclusos que llegaban a la Prisión Wormwood Scrubs (1907)
Fila de celdas en la Cárcel de Welfare Island (Nueva York) en 1920
Interior de la Cárcel Modelo de Barcelona en 1910
Prisión militar en la isla de Alcatraz en 1905, conocida por entonces como "Fort Alcatraz", y construida de forma temporal décadas antes de que se edificara en el lugar la famosa
Prisión de Alcatraz
Celda de confinamiento en solitario en la Prisión de Alipore (India) en 1910
Patio interior y torre de guardia en la Penitenciaría Estatal de Baton Rouge (Luisiana) a principios del siglo XX
Reclusos fabricando zapatos en la Penitenciaría Estatal de Baton Rouge (1900)
Sección para mujeres de una prisión en Colorado (1909)
El interior de una celda para mujeres en la Prisión Estatal de Colorado (1909)
Reclusos sentados en el comedor para cenar en la Prisión de Michigan (1907)
Cárcel del Condado de Cooks (Chicago) en 1920
Grupo de reclusas trabajando en la lavandería de la Prisión Estatal para Mujeres de Boggo Road Gaol (Australia) en 1903
Silla eléctrica en la Prisión Estatal de Auburn (Alabama) en 1908
Cárcel de Cleveland en la década de 1900
Grupo de presos en una prisión de Siberia (1900)
Presos haciendo fila para recibir la ración de comida en la Prisión de Malang (Indonesia) en 1920
Huertos en el patio de la Prisión Fremantle (Australia) en 1909
Penal de mujeres "La Galera" en Alcalá de Henares (1915)
Presos rusos en el Campo de Prisioneros de Altdamm (Alemania) en 1919
Un grupo de presos en la entrada de uno de los edificios de la Penitenciaria Estatal de Misisipi a principio del siglo XX
Una cuadrilla de presos jóvenes afroamericanos de una prisión de Florida en 1903. Una práctica común en el sur de los Estados Unidos era encadenar a los prisioneros entre sí para realizar trabajos físicos como forma de castigo
Mujeres rusas esperando para acceder a la Prisión de Ekaterimburgo en 1919 y llevar comida a su familiares presos
Prisioneros condenados a trabajos forzados en una noria de la Prisión de Rangún (Birmania) en 1900
El Presidio de Ushuaia (Argentina) a principios del siglo XX, conocida como "La cárcel del fin del mundo"
Patio interior de la Prisión de Wakefield (Reino Unido) en 1916
Penitenciaría de Münster (1907)